Sin la participación de las mujeres no habrá Desarrollo Sostenible

El artículo 2 de la Declaración Universal de Derechos Humanos dicta que todas las personas tienen los mismos derechos y libertades, sin distinción por razón, color, sexo, idioma, religión o de cualquier otra índole.

La igualdad de género es, por tanto, un Derecho Humano, a pesar de ello las mujeres siguen siendo las más afectadas a la hora de afrontar los desafíos más urgentes de nuestro tiempo, como la crisis económica, la falta de atención sanitaria, la violencia o el cambio climático.

La discriminación de género, que sigue obstaculizando a las mujeres, es también un obstáculo para nuestro mundo.

La Agenda 2030 y sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), propone una hoja de ruta para alcanzar un Desarrollo Sostenible que no deje a nadie atrás. Lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres forma parte integral de cada uno de los 17 ODS. Garantizar el respeto de los derechos de las mujeres y niñas por medio de todos estos objetivos es la única vía para obtener justicia, lograr la inclusión, conseguir economías que beneficien a todas las personas y cuidar nuestro medio ambiente, ahora y en las generaciones venideras.

La educación un elemento indispensable para lograr la igualdad.

La educación es una de las principales exigencias para alcanzar la igualdad, ya que es el principal mecanismo a partir del cual se abordarían y eliminarían de raíz las prácticas sociales y culturales que impiden a las niñas alcanzar la educación (hoy por hoy se calcula que aproximadamente 132 millones de niñas entre los 6 y 17 años que no asisten a la escuela). Las desventajas de esta situación se traducen en falta de capacitación y por tanto de oportunidades para acceder al mercado de trabajo.

Además, es importante reflexionar sobre el modelo educativo, ya que a grandes rasgos y en muchos lugares, sigue perpetuando la desigualdad de género, por lo que es indispensable la incorporación de modelos educativos no sexistas, el objetivo no es otro que transformar la sociedad para que todas las personas puedan vivir en relaciones de igualdad y equidad.

burkina faso 1



El voluntario más longevo de PROYDE

Francisco Javier Cuesta Ramos

Francisco Javier Cuesta Ramos, el más veterano de los voluntarios de PROYDE, nos abre las puertas de su memoria viva para compartirla con sus amigos y conocidos. Agradecemos que nos permita entrar en su historia personal y, sin duda, todos podemos aprender mucho de una vida dedicada a la familia, a PROYDE y a muchas otras nobles causas.

Nos cuenta nuestro amigo y compañero Paco Cuesta:

“Nací el 4 de diciembre de 1935 en Revilla de Pomar, provincia de Palencia, municipio de unas 30 familias, dependiente de Aguilar de Campoo.

Tengo recuerdos de los crudos inviernos de mi infancia; toda la familia encerrada al calor de la cocina y de los animales compartiendo techo y muros con nosotros.

En mi familia éramos cinco hermanos. Cada dos años se agregaba uno al equipo. La víspera de la Navidad llegó mi hermana María de las Nieves Natividad. Así es que el belén, que cada año dirigía celosamente nuestra madre con grandísima ilusión y creatividad, se improvisó de manera genial e irrepetible. Lo celebramos con todo entusiasmo y los mayorcitos nos constituimos en directores de la fiesta para rematar la inauguración del belén artificial que estábamos construyendo como siempre con arena fina, musgo, ramitas y demás cosillas propias de nuestra celebración navideña.

Mi escolaridad empezó en la escuela del pueblo. En esta escuela teníamos una maestra primeriza que se ejercitaba con el conglomerado de chicas y chicos de pizarra y pizarrín individual, o en el mejor de los casos lapicero de madera de las “libretas de cuentas”. Hacía lo que podía con todos nosotros.

Con frecuencia en invierno, una gruesa capa de nieve cubría los tejados y las calles. Al salir a la calle a buscar agua en la fuente municipal o ir a la escuela o a la iglesia nos enfrentábamos a una red de pasillos sobre la nieve que enlazaban unos domicilios con otros. Mantener el tránsito callejero sobre la nieve helada, era responsabilidad de los dueños de las casas lindantes con las aceras de los domicilios. Los que quitaban la nieve recibían el nombre de “espaladores” y ejercían el servicio con esmero y eficacia.

La experiencia ancestral tenía respuestas y tratamientos caseros para las enfermedades habituales, ya que estaban obligados a combatirlas o soportarlas con escasos remedios. Cuando alguien enfermaba de gravedad, la práctica imposibilidad de visita médica, se remediaba con las “virtudes de los experimentados” en remedios tradicionales. Si, finalmente fallecía, se improvisaba una senda hasta el cementerio. Todo así dispuesto, el señor cura y el grupo de cuantos se consideraran capaces de seguirle, conducían el cadáver al cementerio para “darle tierra” al estilo y modo ancestral. El médico, tenía muy difícil ascender los mil doscientos cincuenta metros de altura, entre su domicilio en Pomar y el de sus pacientes en Revilla, con todo el camino soterrado bajo la nieve.

De este modo he intentado describir el paisaje recorrido mientras iba cumpliendo años y se sucedían cambios sorprendentes en mi casa. Primero se vio asediada por un cuerpo de ejército procedente de Cantabria, debido a que Revilla cierra el paso entre Santander y Burgos. El convertirnos en punto estratégico entre los dos frentes, ocasionó alguna muerte por disparos perdidos, como la de mi abuelo, por una desafortunada salida de casa.

Entre los diez y los doce años, durante los meses de diciembre a marzo, en que había menos urgencias en cultivar nuestros campos, mis padres me enviaban al colegio menesiano de Aguilar de Campoo, para mejorar en lo posible la enseñanza primaria recibida en mi escuela. Estos años en Aguilar, además de estudiar con los fraile, ejercía de “hermano mayor” en casa.

Mis padres, cristianos fervientes, comprometidos en bautizar a los hijos y ofrecerlos a alguna congregación religiosa, buscaban la oportunidad de enviar a todo su prole a alguna congregación religiosa como los abuelos, que habían ingresado a las tres hermanas de mi padre en la Congregación de Religiosas Franciscanas de Montpellier. La mayor de ellas, ejercía de superiora en el Colegio de Santo Domingo de la Calzada (Logroño). Esta circunstancia explica que mis dos hermanas, una de seis y otra de cuatro años, disfrutaran del internado desde antes de la guerra de 1936.

La ilusión de mi madre era poder tener un hijo misionero en Molokai, como el Padre Damián.

Después de la guerra un día pasó, por aquel pueblecillo perdido en la montaña palentina, el reclutador de los Padres Maristas, el P. Hermenegildo y consiguió de mis padres ingresarme interno, como “aspirante”, en los Padres Maristas de Vera de Bidasoa (Navarra). Allí cursé los cinco años de bachillerato, privado, no oficial. Seguidamente hice la filosofía y la teología, ambas completas, como un seminarista más, decidido a profesar como novicio de los Padres maristas y concluir con la ordenación sacerdotal.

La vida no es un camino de rosas y Dios escribe derecho con renglones torcidos. Así es que, después de tres años de lucha y reflexión profunda, con ayuda de psicólogos y directores espirituales, tuve que afrontar el inmenso disgusto personal, familiar y de mi congregación religiosa, la víspera de formular el compromiso final de mi consagración al sacerdocio, como Padre Marista y volver al laicado, sin abandonar el compromiso irreductible de cristiano activo donde se me admitiera.

En 1957 convalidé mis cursos, legalmente superados, de bachillerato y de Filosofía y Teología en el Instituto Milá y Fontanals en Barcelona.

Cumplí el servicio militar obligatorio en el ejército de Marina, en Madrid, sin mérito especial. Años más tarde, sin saber que era conducido por “Él”, como siempre, llegué a prestar mi ayuda al párroco de San Patricio, en Madrid. Todo ello ha venido a ser un gran regalo en mi vida.

Después de mi jubilación como empleado del BHA (Banco Hispano Americano), los años, la vida, con sus circunstancias imprevistas, me condujo a La Salle y, en definitiva, a PROYDE en 1993.

Desde 1993 han pasado 28 años disfrutando de PROYDE, mientras desempeñaba diferentes funciones: Preparación y seguimiento de los viajes de los voluntarios de verano que visitaban a los misioneros para conocer su gran labor e intentar prestar compañía y en lo posible alguna ayuda. En aquella época eran grupos muy numerosos y había que sacar visados, comprar billetes de viaje, formalizar los seguros de asistencia y permanecer siempre atento a posibles incidencias para que todos se sintieran acompañados allá donde estuvieren hasta regresar a su domicilio u oficina de procedencia.

Colaboré con el H, Julián Jauregui en tareas de secretaría, de archivos, elaboración de la documentación propia de cada uno de los proyectos y de relación con todas las instituciones de las que PROYDE dependía como Organización No Gubernamental para el Desarrollo, especialmente durante el tiempo cercano a su jubilación.

El H. Pedro Arrambide, me entregó desde el principio su delegación para representar a PROYDE ante diversos organismos y ONGD. Durante veinte años asistí a la Asamblea General de la Coordinadora estatal de ONGD de España para representar a PROYDE.

Pedro Arrambide también me encomendó la responsabilidad de acoger a los voluntarios, tanto locales como a los que venían para hacer las prácticas. Esta actividad y la atención del teléfono, se me ha dado bien, y me ha dado ocasión de presentar a PROYDE algún contacto. Han sido unos de los servicios que he prestado en la sede de PROYDE a lo largo de los años.

También tuve muy buena relación con Javier Sánchez y con el Hermano Eusebio Fernández. Fui su colaborador en las tareas que me iban encomendando.

No olvidaré nunca el viaje que hice a varios países de África del Oeste como representante de PROYDE, para conocer los proyectos que se estaban haciendo y encontrar a los Hermanos en su ambiente misionero. Visité las obras de Togo, Benín y Costa de Marfil.

Termino dando gracias a Dios, a La Salle y a PROYDE por estos 28 años de intensa colaboración.

Francisco Javier Cuesta Ramos




Soberanía alimentaria y el derecho de los pueblos

— La Vía Campesina Internacional  definió  el 17 de Abril  como – el Día Internacional de las Luchas Campesinas —

El hambre extrema y la malnutrición siguen siendo un enorme obstáculo para el desarrollo sostenible y constituyen una cuestión de vida o muerte para una importante porción de la población. Por ello, la Agenda 2030mediante su ODS 2: Hambre Cero propone, entre otras cosas, erradicar esta situación buscando una seguridad alimentaria. Pero ¿Qué es la seguridad alimentaria?

El concepto de Seguridad Alimentaria surgió por primera vez en 1943 durante la Cumbre Mundial sobre la Alimentación y a partir de ese momento el concepto ha seguido evolucionando hasta la Cumbre Mundial sobre la Alimentación de 1996 donde se presentó la definición más conocida: La seguridad alimentaria existe cuando todas las personas tienen, en todo momento, acceso físico, social y económico a alimentos suficientes, inocuos y nutritivos que satisfacen sus necesidades energéticas diarias y preferencias alimentarias para llevar una vida activa y sana.

De esta manera, este concepto plantea cuatro dimensiones principales: la disponibilidad física de los alimentos, el acceso económico u físico a los alimentos, la utilización de los alimentos y la estabilidad en el tiempo de las tres dimensiones anteriores.

En este contexto, han surgido muchas críticas en torno a la noción de seguridad alimentaria, y se ha presentado un nuevo concepto: el de soberanía alimentaria.

Ambas ideas pueden parecer a priori muy parecidas, pero presentan grandes diferencias. La seguridad alimentaria pone el énfasis en las relaciones, tanto físicas como socioeconómicas, entre seres humanos y alimentación. Mientras que el concepto de soberanía alimentaria se centra en los derechos de los pequeños agricultores y agricultoras, así como en la tierra y la biodiversidad.

En este sentido, la Vía Campesina (2017) define la soberanía alimentaria como el derecho de los pueblos, comunidades y países a definir sus propias políticas alimentarias que sean ecológica, social, económica y culturalmente apropiadas a sus circunstancias, reclamando la alimentación como un derecho. 

De esta manera los alimentos son reconocidos como algo vinculado con la tierra, que tenemos que cuidar y no podemos abstraer, dejando de lado el tradicional concepto de alimento como mercancía. Por ello, la clave de esta lucha radica en la búsqueda de un modelo agroalimentarioque garantice el acceso a alimentos producidos localmente a través de canales cortos de comercialización en vez del actual proceso de distribución internacional. 

Finalmente, en este reconocimiento del papel de los alimentos también se busca empoderar el papel y los derechos de los agricultores y agricultoras. Así, la soberanía alimentaria se presenta como un proceso de resistencia popular y su conceptualización no puede sacarse del contexto de la dinámica de los movimientos sociales que están en el centro de esas luchas. 

Unas luchas que se están llevando a cabo en los espacios locales desde donde nosotros, como ciudadanos, podemos contribuir con nuestro granito de arena. Todas aquellas iniciativas que pongan en contacto productores y consumidores pueden tener un gran impacto, ya sea mediante grupos y cooperativas de consumo ecológico, huertos urbanos o comprando directamente en estos espacios locales a los propios campesinos. De esta manera, actuando local podemos dejar una importante huella a nivel global, contribuyendo a un futuro más igualitario y sostenible.




Tarjeta Roja

¡Muéstrale la Tarjeta Roja al Trabajo Infantil!

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Te invitamos a que puedas hacer virtualmente esta actividad. Anímate a hacerla con tus alumnos/as si eres profesor o profesora.

Anima a otros compañeros y compañeras a que lo hagan a la vez que tú desde sus casas. Luego… si nos mandas fotos, las subiremos a las redes sociales de PROYDE.

Accede a la actividad online a través de este link.

¿En qué consiste?

Desde el Departamento de Comercio Justo de PROYDE, en el marco del proyecto Centros Educativos por el Comercio Justo, este curso escolar 2019 – 2020 queremos centrar nuestra atención en el trabajo infantil y la producción de material deportivo. Nos vamos de viaje (imaginario) a Pakistán, a descubrir la historia de Azad, y a escuchar el testimonio de Amina y Hadia.

Azad trabaja unas 10 horas al día cosiendo balones de fútbol que se venderán por entre 20 y 30 € cada uno. Gana 1,30 € al día.

Amina y Hadia van a la escuela. Quieren ser doctora y maestra, y gracias a que su padre Liaqat gana un sueldo digno, tienen posibilidades de conseguirlo. El taller donde trabaja Liaqat se pasó al Comercio Justo hace unos años.

Hemos pensado en una sencilla actividad para realizar en el aula, para generar diálogo e informar sobre la realidad de la producción de balones en Pakistán.

¿Cómo participar?

–Lo primero, habrá que pedir permiso para realizar un taller de una hora con una o más clases del primer ciclo de la ESO.

–A continuación, descarga la flamante Guía Centros Educativos por el Comercio Justo y lee detenidamente la actividad 4, los anexos incluidos.

–Imprime en cartulina los patrones de balón de fútbol (ANEXO VII) para cada grupo (y por tanto, cada balón) se necesitarán 3 copias del patrón blanco (pág. 38) y 1 copia del patrón negro (pág. 39). Aunque es mejor ser previsor/a, e imprimir unas páginas más de cada.

–Comprarás unas buenas agujas e hilo resistente para toda la clase.

–Veremos en clase el video que está más abajo, dura 8 minutos, y a continuación realizaremos el taller.

–Dividiremos la clase en grupos de 4 o 5 personas, y explicaremos que cada grupo tendrá que coser un balón.

–Se sentarán en el suelo, sin poder levantarse ni hablar durante la duración del taller de costura.

–Les contaremos la historia de Azad mientras cosen.

–Cuando terminen abriremos un debate, preguntaremos cómo se han sentido y que compartan qué piensan/sienten.

–Dejaremos 10 minutos al final para realizar la evaluación individual y grupal que encontraremos al final de la guía, y la remitiremos a PROYDE – Comercio Justo

Esta actividad cuenta como actividad de sensibilización para la renovación de la acreditación de Centros Educativos de Comercio Justo 2020.




Valor a la Educación Inclusiva

Valor a la educación inclusiva

Educación Inclusiva ante necesidades especiales


colabora con proyectos

objetivo

Garantizar a la población una educación inclusiva, equitativa y de calidad

Ubicación

Champerico, Retalhuleu, Guatemala

Presupuesto

351.472,50€

Financiadores

Xunta de Galicia, ASFE y PROYDE

ODS

ODS 4 Educación de Calidad
ODS 5 Igualdad de Género

sobre el proyecto

Con el fin de promocionar la de Educación Inclusiva para los niños y niñas con necesidades educativas especiales, la propuesta concreta del proyecto es: Mejorar las condiciones de 6 escuelas de educación primaria y preprimaria y un Centro de Recursos para la Educación Inclusiva para proporcionar una adecuada integración del alumnado con necesidades educativas especiales, dando atención a la equidad de género y la interculturalidad.

contribuye con nuestros proyectos

Ayuda a PROYDE con una donación o asociándote para apoyar más proyectos como este.

Toda ayuda cuenta porque mucha gente pequeña, haciendo muchas cosas pequeñas, en muchos lugares pequeños, puede cambiar el mundo.

Ayúdanos a promover una educación de calidad para todo el mundo, a luchar por la igualdad, promover un estilo de vida sostenible en el largo plazo y a combatir la desigualdad social.

¡Gracias por tu apoyo!















A continuación te mostramos los datos para que realices tu donación via Bizum:

  • CÓDIGO: 01200
  • A nombre de: ASOCIACION PROYDE



Producción Rural Sostenible

Producción Rural Sostenible

Familias campesinas paraguayas se integran en un tejido productivo sostenible


colabora con proyectos

objetivo

Promover un modelo económico-productivo sostenible e inclusivo

Ubicación

Varios distritos de Paraguay

Presupuesto

350.000€

Financiadores

AECID

ODS

ODS 2 Hambre Cero
ODS 4 Educación de Calidad
ODS 5 Igualdad de Género
Proyecto PROYDE Paraguay

sobre el proyecto

La propuesta busca aumentar de manera sostenible la producción y productividad de explotaciones de 327 familias campesinas (223 mujeres – 104 varones, entre 18 y 55 años) en dos departamentos de Paraguay, Concepción y San Pedro, para proteger y recuperar la economía con soluciones sostenibles, agroecológicas, mejorando sus capacidades para la comercialización y provisión de alimentos, apoyando actividades económicas de mujeres como vía de liderazgo participativo, fortaleciendo capacidades de incidencia y contraloría para la protección de derechos humanos. Especial atención a la participación de las mujeres en el proceso y en los resultados esperados.

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Red de Escuelas Rurales

RED DE ESCUELAS RURALES

Mejora de la calidad de la educación primaria a la infancia


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objetivo

Mejora de la calidad educativa primaria de la infancia rural sin recursos

Ubicación

Nicaragua

Presupuesto

165.924€

Financiadores

Principado de Asturias, PROYDE

ODS

ODS 4 Educación de Calidad
Proyecto creación Escuelas Nicaragua

sobre el proyecto

El proyecto persigue la cobertura educativa primaria sostenible y de calidad para los niños y niñas de las comunidades rurales de la región Norte y la región Sur de la Costa Atlántica de Nicaragua, donde no llega el Ministerio de Educación local. El proyecto beneficia a 473 docente rurales, 800 madres y padres, 39 responsables del proyecto y alrededor de 11.086 estudiantes. La propuesta incluye: La capacitación metodológica y pedagógica de docentes; el refuerzo del papel de las familias y las comunidades en el derecho a la educación, especialmente, las niñas; y el refuerzo de los materiales de apoyo escolar en las escuelas más carentes.






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Hogar Akwaba

HOGAR AKWABA

Apoyo a la reinserción familias, social y educativa de niños de la calle


colabora con proyectos

objetivo

Acogida anual de más de 160 niños de la calle para su protección y reinserción

Ubicación

Barrio de Abobo, Abidján (Costa de Marfil)

Presupuesto

156.914€

Financiadores

Fundación ENESBA, PROEGA y PROYDE

ODS

ODS 1 fin de la pobreza
Hogar Akwaba Costa de Marfil

sobre el proyecto

El proyecto aborda la necesidad principal de ofrecer a los niños de la calle protección, alojamiento, educación y la posibilidad de reintegrarse en la familia. Las autoridades no atienden este problema que afecta a cientos de miles de niños en el país, especialmente en las grandes ciudades como Abidjan. El Hogar Akwaba fue creado por los Hnos. de La Salle con el fin de acoger a niños de entre 7 y 16 años durante un tiempo máximo de 4 años, ofrecerles una casa y una educación, así como trabajar paralelamente con las familias con el fin de lograr la reinserción social y familiar de los/as niños/as del hogar.

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Centro Clima

Proyecto clima

Formación agropecuaria para garantizar la alimentación de familias campesinas vulnerables


colabora con proyectos

objetivo

 Contribuir al ejercicio del derecho a la soberanía alimentaria

Ubicación

Región des Cascades, Burkina Faso

Presupuesto

49.058€

Financiadores

Ayuntamiento de Córdoba, Inversiones Apodaka y PROYDE

ODS

ODS 2 Hambre Cero

sobre el proyecto

El proyecto quiere garantizar las acciones que atienden a la situación de inseguridad alimentaria provocada por la sequía y las malas cosechas recurrentes en Burkina Faso, mediante la formación a familias campesinas, principalmente en agricultura y ganadería familiar de renta. Para ello, en el Centro Lasaliano de Iniciación a la Profesión de la Agricultura (CLIMA en sus siglas en francés) unas 24 familias campesinas se forman cada año, durante 2 años (2 cosechas agrícolas) en diversas áreas del sector agropecuario sostenible, ampliado a la formación piscícola y, recientemente, la formación en explotación avícola.

nuestros objetivos

En paralelo, el centro ha visto la necesidad de implementar formaciones transversales a las familias beneficiarias, en: equidad de género, en derechos humanos, en nutrición, higiene, y en técnicas adicionales de producción agrícola sostenible y respetuosa con el medio ambiente. El centro forma de manera equitativa tanto a los hombres como a las mujeres, pero dando visibilidad al papel primordial que juegan las mujeres en la producción agrícola destinada al consumo familiar fomentando que las mujeres tomen parte en las decisiones que afectan a la economía familiar.

Proyecto Clima PROYDE
Proyecto Clima Burkina Faso

También se imparte formación escolar para los menores residentes en el centro. Los responsables locales han considerado que dos años de formación y aprendizaje en el Centro hará posible que estas familias se conviertan en líderes del desarrollo, a la vuelta a sus pueblo, e igualmente que sean capaces de la transformación y comercialización de los diversos productos en los que decidan trabajar.

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Educación para los Pigmeos

EDUCACIÓN PARA LOS PIGMEOS EN CAMERÚN

Promoción de la educación inclusiva para los niños y niñas pigmeos de la etnia Baká.


colabora con proyectos

objetivo

Promoción educativa inclusiva de calidad para las niñas y niños pigmeos

Ubicación

Distritos: Ngoyla, Mindourou, Lomié y Messok de Camerún

Presupuesto

77.796€

Financiadores

Mc Yadra, Ayuntamiento de Gijón y PROYDE

ODS

ODS 4 Educación de Calidad
ODS 5 Igualdad de Género
Proyecto PROYDE Camerún

sobre el proyecto

La minoría étnica Baká siempre ha tenido doficultades para acceder a la educación, por lo que los Hermanos de La Salle trabajan para lograr su inserción desde hace más de 35 años en la región este de Camerún. Los pigmeos Baká son una población indígena asentada en los bosques de Boumba y Ngoko y Upper Nyong; viven en pequeños «campamentos», ubicados en el borde de los pueblos bantúes.

Los problemas

Sus campamentos no tienen reconocimiento legal de las autoridades, por lo que no pueden beneficiarse de la infraestructura social, como hospitales y escuelas. La escuela primaria más cercana está a unos 5 a 12 kilómetros de los campamentos, siendo un obstáculo para un niño viajar esta distancia. Además, los niños baká que logran inscribirse, tienen problemas para permanecer, debido al estigma del que son víctimas. Los Hermanos de la Salle en Camerún han acercado la escuela a los niños baká creando 14 Centros de Educación Básica CEB, para promover su acceso a la educación con un método educativo específico para su entorno.

Educación de Pigmeos en Camerún
Estudiantes del Proyecto en Camerún

Nuestros objetivos

Este proyecto en concreto quiere consolidar este trabajo educativo y mejorar las condiciones de la red deescuelas Baká, a través de las siguientes acciones concretas:

  1. Renovación del mobiliario escolar deteriorado.
  2. Adquisición de 1.800 libros de inglés, francés y matemáticas, por la falta de manuales y materiales didácticos.
  3. Realización de jornadas formativas en materia de Derechos de la Infancia, dirigidas al alumnado baká, familias y educadores.

 

La población infantil beneficiaria actual es de unos 800 alumnos/as de entre 4 y 10 años, el 49% son niñas.

A pesar de la interrupción del año escolar debido a la pandemia de la Covid-19, creemos que el año ha ido bien, gracias a la participación de las personas comprometidas con el programa, como los profesores, que siempre trabajan en unas condiciones muy difíciles, y las familias que matriculan a sus hijas e hijos en nuestras escuelas. Nos acordamos también de aquellos que siempre nos han apoyado económicamente, como PROYDE

A todos estos actores, les enviamos nuestro más sincero agradecimiento.

Frère Gislhain WAKOUM

Director de la Red de Centros de Base (Lomie)

contribuye con nuestros proyectos

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Ayúdanos a promover una educación de calidad para todo el mundo, a luchar por la igualdad, promover un estilo de vida sostenible en el largo plazo y a combatir la desigualdad social.

¡Gracias por tu apoyo!




Si prefiere, puede realizar la transferencia directamente a favor de PROYDE a través de nuestra cuenta:

IBAN: ES37 1550 0001 2400 0098 5325

SWIFT: ETICES21XXX


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